JESUCRISTO, EL ÚNICO MEDIO DE REDENCIÓN
“Yendo un poco
adelante, se postró sobre su rostro, orando y diciendo: Padre mío, si es
posible, pase de mí esta copa” Mateo
26:39
La petición del Señor
en su oración al Padre en el Huerto del Getsemaní, nos hace erróneamente pensar
que Cristo estaba dispuesto a abandonar el plan divino de redención si así lo
determinaba el Padre. Sin embargo, la oración del Señor tiene el propósito de
dejar en claro que su entrega en la cruz sería la única manera de efectuar ese
plan redentor, no había forma en que se pudiera lograr la remisión de pecados
sin un Cordero aceptable.
"Y sin derramamiento de sangre no se hace remisión" He. 9:22
Cristo cumplió todos
los requisitos de la Ley de Dios para entregarse como el Cordero Santo, él fue
el sacrificio perfecto y suficiente en la cruz, el sustituto por el pecador.
La copa no le fue
quitada a Cristo; si hubiera otro medio u otra forma de redención, el Padre
hubiera omitido el castigo del Hijo, pero no la hubo; Jesús pagó el precio
expiatorio, el pago total por los pecados del mundo (Ro. 3:24,25; Col.
1:13,14).
Este Plan redentor fue
dispuesto por Dios mucho antes de la creación del mundo (Ef. 1:4; 2 Ti. 2:9),
un Plan redentor de salvación no conforme a nuestras obras, sino según el
propósito suyo de mostrarnos su gracia por medio de Jesucristo (2 Ti. 1:9). En
este Plan redentor, Cristo se haría hombre para descender a la tierra, y así
fue, al vivir una vida santa, venció al pecado, y al levantarse de la tumba
venció a la muerte.
”Pablo, siervo de Dios y apóstol de Jesucristo,
conforme a la fe de los escogidos de Dios y el conocimiento de la verdad que es
según la piedad, en la esperanza de la vida eterna, la cual Dios, que no
miente, prometió desde antes del principio de los siglos” Tito 1:1,2
El Plan de Redención a
la humanidad fue un pacto de Dios (Padre, Hijo y Espíritu Santo) desde la
eternidad, que nos da la esperanza de vida eterna a todos lo que creemos en él,
a quienes le hemos recibido como el Señor y Salvador de nuestra vida.
"en quien tenemos redención por su sangre, el
perdón de pecados" Col.
1:14
ORACIÓN: gracias Dios por mostrar tu gracia al
darme salvación.