EL GOZO DE UN PADRE
“Jehová está en medio de ti, poderoso, él salvará; se gozará sobre ti con alegría, callará de amor, se regocijará sobre ti con cánticos” Sofonías 3:17
Como padres, existe un gozo indescriptible cuando tenemos en nuestras manos la solución a las necesidades de nuestros hijos; por ejemplo, cuando tenemos el consejo adecuado que cambiará su ánimo, cuando mitigamos sus temores al abrazarles en un momento difícil, cuando podemos comprarles aquello que desean en su corazón.
Muchas veces es mayor el gozo que sentimos al poder suplir o saciar la necesidad de nuestros hijos, que la alegría que sienten ellos al recibir dicha bendición (Dios nos ha hecho con la necesidad inherente como padres, de ser protectores y proveedores). Sin embargo, existen ocasiones en que no podemos suplir o saciar el corazón de ellos, quisiéramos con toda nuestra alma, pero nuestras limitaciones humanas nos lo impiden.
¿Te has puesto a pensar que Dios es un Padre como ningún otro hay en la tierra?
Primero: porque Él conoce a profundidad nuestro corazón y cada una de nuestras necesidades físicas, emocionales y espirituales, aun antes de expresarlas.
Segundo: el gozo que Él experimenta al darnos su gracia, comenzando con el regalo eterno de salvación, es simplemente inconcebible; Él se goza al bendecir a sus hijos con salud, protección, cuidados, favores; todo ello, resultado de su inexplicable amor.
Tercero: no existe algo que podamos pedirle sin que él no lo pueda hacer, pues su poder no se limita a ninguna situación. Él tiene el poder para cambiar cualquier situación, escenario o condición en nuestra vida, porque Él es Dios.
Sofonías 3:17 en su versión NTV lo explica así:«Pues el Señor tu Dios vive en medio de ti. Él es un poderoso salvador. Se deleitará en ti con alegría. Con su amor calmará todos tus temores. Se gozará