Gustavo Miranda

LA CORRECCIÓN AL NECIO Y AL SABIO

El que corrige al escarnecedor, se acarrea afrenta; El que reprende al impío, se atrae mancha. No reprendas al escarnecedor, para que no te aborrezca; Corrige al sabio, y te amará. Da al sabio, y será más sabio; enseña al justo, y aumentará su saber” Proverbios 9:7-9.

 

A casi nadie le gusta ser reprendido. A menudo parece incómodo tanto para el que es aconsejado para apartarse de hacer un mal, como para el mismo que brinda el consejo.

La Biblia es clara al enseñarnos que antes de corregir, debemos saber a qué tipo de persona le compartiremos consejo.


La Biblia nos enseña que al corregir a un necio, esto es, a alguien que no tiene ningún temor del Señor ni aprecio por su Palabra, acarreará para sí ofensas y odio de parte de ellos. La versión PDT dice: ”...reprende al perverso… (y) ganarás insultos y desprecio”. Esto es así, porque al impío no le gusta ser confrontado con su propio pecado, con los errores que va cometiendo; el impío no estará nunca dispuesto a ser enfrentado con la verdad de la Palabra de Dios. En la Biblia, un escarnecedor es alguien que humilla, ultraja, ofende, se burla, ridiculiza a otros, injuria, insulta a las personas. Para el impío la reprensión es una ofensa, un agravio.


En cambio, el sabio amará el consejo al ser corregido, sabrá expresar gratitud por ser instruido en el camino, pues entiende que si dedicamos tiempo para hacerle ver sus errores, es porque deseamos verlo crecer, madurar en la verdad, porque le amamos. Si aquel que es amonestado es sabio, entenderá que el consejo proviene de Dios y este consejo contribuirá al desarrollo espiritual de su vida. Un hijo de Dios atesora la instrucción y la amonestación, pues sabe que viene del Señor (Pr. 1:8,9).


La palabra "discípulo" proviene del latín «discipulus», y este del verbo «discere», que significa "aprender"; osea, aquel que aprende o que se deja instruir. Es de esta misma raíz donde deriva también la palabra "disciplina". Un discípulo de Cristo es aquella persona que conoce el evangelio de Jesucristo y constantemente es instruida en el camino de Dios. La Palabra del Señor es un manual de instrucciones precisas para el creyente que busca ser como Cristo, su Señor y Salvador.


Escucha el consejo, y recibe la corrección, para que seas sabio en tu vejez” Pr. 19:20.


¡El cristianismo es un camino de instrucción! Primero, porque el cristiano vive bajo la dirección del Espíritu Santo, quien diariamente nos enseña y guía a la verdad en la vida cristiana. Segundo, el cristiano tiene en sus manos la sabiduría de Dios, la Biblia, que es un manual de instrucciones, útil para moldear nuestra vida a la imagen de Cristo. Tercero, un cristiano vive y desarrolla su fe dentro de una iglesia, el cuerpo de Cristo; cada creyente tiene una cobertura espiritual de parte de su pastor, quien le aconseja, le guía, le motiva y le corrige cuando fuera necesario en algún aspecto de su vida, con el fin de glorificar a Dios en cada área. El consejo de miembros espiritualmente maduros en la iglesia también nos ayuda a crecer espiritualmente. Ese es el plan de Dios para su iglesia, que juntos crezcamos en conocimiento y sabiduría, ”exhortarnos unos a otros cada día… para que ninguno se endurezca por el engaño del pecado” He. 13:1. La Biblia exhorta:”sepa que el que haga volver al pecador del error de su camino, salvará de muerte un alma, y cubrirá multitud de pecados” Stg. 5:20


El creyente genuino buscará la verdad y amará ser reprendido cuando incurra en un error, mostrando humildad en el proceso, pues ama la sabiduría y desea más de ella.


¿Te das cuenta? Todo el tiempo el cristiano está siendo guiado y encaminado a la luz de la Palabra de Dios.


…Corrige al sabio, y te amará......enseña al justo, y aumentará su saber.” Proverbios 9:8,9


Y tú hermano, ¿cómo recibes la corrección en tu vida? ¿Con aprecio y gratitud? Agradece la instrucción que se te brinda con amor, es para tu crecimiento espiritual.

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Pastor Gustavo Miranda

Pastor en Iglesia Bautista Berea en Gómez Palacio, Dgo.
Doctor en Teología, maestro en educación y ministro de música y adoración.

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